1ª
EVALUACIÓN:
FILOSOFIA
ANTIGUA Y MEDIEVAL:
Una contextualización filosófica
adecuada (mito vs. logos, orientación cosmológica vs. giro
antropocéntrico en el mundo de la sofística y el socratismo
ateniense, la llegada del cristianismo y la síntesis de filosofía
griega y fe religiosa) debe servir para una lectura en clase y
personal de los textos que se marcan en la ponencia de la
materia.
El enfoque de la materia, a lo largo del curso, debe
ser eminentemente práctico: lectura, cuestiones y comentarios en la
clase, empleo de material complementario para los contenidos
teóricos y de contextualización.
En esta primera evaluación
se deben leer los textos de República de Platón (los tres
símiles), los de Santo Tomás y el texto de Descartes del Discurso
del método. En el ateniense como en el aquinate encontramos una
parte ontoepistemológicamente orientada, y otra de cuño
ético-político. Se tratará, a lo largo del curso, de solapar o
coordinar, en la medida de los posible, los contenidos y textos
relativos a la razón teórica y los relativos a la razón práctica.
Esto resulta factible ya en la primera evaluación, dada la remisión
política de la epistemología platónica, así como el doble
interés, filosófico-religioso y iusnaturalista de los fragmentos
propuestos por la ponencia para Sto. Tomás.
Un primer examen
de control, a mediados de octubre debe servir a los alumnos y al
profesor para observar el rendimiento de la mecánica de la clase
(actividad y estudio). Después realizaremos el examen en sí sobre
Platón (vocabulario y explicación del fragmento propuesto). La
explicación posterior del texto tomista nos permitirá, al filo del
final de la primera evaluación, añadir a las cuestiones del examen
una relativa a la relación entre las diferentes propuestas
filosóficas, a partir de esos dos intereses básicos ,mentados más
arriba: razón teórica y razón práctica.
FILOSOFIA
ANTIGUA Y MEDIEVAL:
Una contextualización filosófica adecuada (mito vs. logos, orientación cosmológica vs. giro antropocéntrico en el mundo de la sofística y el socratismo ateniense, la llegada del cristianismo y la síntesis de filosofía griega y fe religiosa) debe servir para una lectura en clase y personal de los textos que se marcan en la ponencia de la materia.
El enfoque de la materia, a lo largo del curso, debe ser eminentemente práctico: lectura, cuestiones y comentarios en la clase, empleo de material complementario para los contenidos teóricos y de contextualización.
En esta primera evaluación se deben leer los textos de República de Platón (los tres símiles), los de Santo Tomás y el texto de Descartes del Discurso del método. En el ateniense como en el aquinate encontramos una parte ontoepistemológicamente orientada, y otra de cuño ético-político. Se tratará, a lo largo del curso, de solapar o coordinar, en la medida de los posible, los contenidos y textos relativos a la razón teórica y los relativos a la razón práctica. Esto resulta factible ya en la primera evaluación, dada la remisión política de la epistemología platónica, así como el doble interés, filosófico-religioso y iusnaturalista de los fragmentos propuestos por la ponencia para Sto. Tomás.
Un primer examen de control, a mediados de octubre debe servir a los alumnos y al profesor para observar el rendimiento de la mecánica de la clase (actividad y estudio). Después realizaremos el examen en sí sobre Platón (vocabulario y explicación del fragmento propuesto). La explicación posterior del texto tomista nos permitirá, al filo del final de la primera evaluación, añadir a las cuestiones del examen una relativa a la relación entre las diferentes propuestas filosóficas, a partir de esos dos intereses básicos ,mentados más arriba: razón teórica y razón práctica.
Una contextualización filosófica adecuada (mito vs. logos, orientación cosmológica vs. giro antropocéntrico en el mundo de la sofística y el socratismo ateniense, la llegada del cristianismo y la síntesis de filosofía griega y fe religiosa) debe servir para una lectura en clase y personal de los textos que se marcan en la ponencia de la materia.
El enfoque de la materia, a lo largo del curso, debe ser eminentemente práctico: lectura, cuestiones y comentarios en la clase, empleo de material complementario para los contenidos teóricos y de contextualización.
En esta primera evaluación se deben leer los textos de República de Platón (los tres símiles), los de Santo Tomás y el texto de Descartes del Discurso del método. En el ateniense como en el aquinate encontramos una parte ontoepistemológicamente orientada, y otra de cuño ético-político. Se tratará, a lo largo del curso, de solapar o coordinar, en la medida de los posible, los contenidos y textos relativos a la razón teórica y los relativos a la razón práctica. Esto resulta factible ya en la primera evaluación, dada la remisión política de la epistemología platónica, así como el doble interés, filosófico-religioso y iusnaturalista de los fragmentos propuestos por la ponencia para Sto. Tomás.
Un primer examen de control, a mediados de octubre debe servir a los alumnos y al profesor para observar el rendimiento de la mecánica de la clase (actividad y estudio). Después realizaremos el examen en sí sobre Platón (vocabulario y explicación del fragmento propuesto). La explicación posterior del texto tomista nos permitirá, al filo del final de la primera evaluación, añadir a las cuestiones del examen una relativa a la relación entre las diferentes propuestas filosóficas, a partir de esos dos intereses básicos ,mentados más arriba: razón teórica y razón práctica.